Seguro que no te descubrimos nada nuevo si te decimos que en el mercado laboral se ha desatado una auténtica «guerra» por la captación de talento. Aunque las cifras de desempleo en España son altas, muchas empresas siguen teniendo problemas a la hora de encontrar a los candidatos más adecuados para los puestos de trabajo ofertados.
Es algo que ocurre habitualmente con los puestos de carácter técnico. Hay pocos especialistas y mucha demanda de los mismos. En consecuencia, las vacantes tardan en cubrirse. De hecho, muchas veces las empresas no encuentran profesionales desempleados, así que tienen que hacer ofertas lo suficientemente atractivas para atraer a aquellos especialistas que están trabajando en otro sitio.
No es fácil convencer a alguien de que deje su empleo actual y vaya a trabajar a tu empresa, pero tampoco es imposible. Veamos cómo puedes atraer talento y conseguir a los mejores candidatos.
Hay que cuidar la imagen de la empresa de cara a la captación del talento
Las empresas tienen que trabajar el employer branding. Es decir, la imagen que proyectan de cara al exterior como empleadoras.
Igual que las organizaciones trabajan su imagen de marca en el mercado para intentar conseguir vender más productos o servicios, también deben «venderse» a sí mismas como empleadoras. Demostrar que son una mejor opción para trabajar en ellas que su competencia.
La clave para lograrlo es que los empleados actuales que forman parte de la plantilla estén felices. Si se sienten a gusto, no dudarán en recomendar a cualquiera su empresa para trabajar. Se sentirán orgullosos de ser valorados y de que su talento se tengan en cuenta. En consecuencia, se convertirán en los mejores embajadores de tu marca.
Redacción cuidada y honesta de las ofertas de trabajo
La redacción que se suele dar a los anuncios en los que se buscan candidatos es uno de los principales obstáculos para la captación de talento. Suele ocurrir que la oferta está tan pobremente desarrollada que no resulta nada atractiva.
Si una empresa quiere encontrar al candidato perfecto, debe publicar un anuncio en el que detalle bien qué está buscando. Por eso, la oferta debe estar redactada de forma clara y precisa. Especificando qué cualidades son necesarias para ocupar el puesto y qué ofrece ella a cambio.
Esto último es especialmente importante. En los últimos años, ha existido una tendencia que llevaba a las empresas a no especificar en sus anuncios qué ofrecían, o hacerlo de forma muy poco transparente. El caso típico es la fórmula «remuneración a convenir».
Si el anuncio no es transparente, los candidatos con más talento no le van a prestar atención. Por otro lado, hay que asegurarse de que la información facilitada sea honesta y coincida con la realidad. No se puede ofrecer en un anuncio algo que se sabe que no se va a convertir en realidad. Esto haría que el candidato se sintiese «estafado» y que su percepción sobre la compañía no fuera buena.
Dar una buena atención a los candidatos
La captación de talento no termina cuando consigues que personas con currículums de calidad se interesen por la oferta de trabajo publicada. Debe continuar durante todo el proceso de selección.
Tener muchos candidatos no significa tener mucho entre lo que elegir. Puede que entre 100 perfiles preseleccionados solo cuatro o cinco encajen realmente con lo que se está buscando. Para que esas valiosas personas no acaben abandonando el proceso de reclutamiento, hay que darles un buen trato.
Todos los candidatos deben sentirse bien valorados a lo largo del proceso, sean o no seleccionados, incluso aunque encajen muy poco con el perfil que se está buscando. Y para ello no hay nada mejor que aportarles información sobre su candidatura.
Muchas empresas se limitan a guardar silencio después de una entrevista de trabajo. Pocas veces se llama a los candidatos para decirles personalmente que su perfil no ha sido seleccionado. Sin embargo, esto es algo que puede mejorar mucho la imagen de la compañía como empleadora. De hecho, es una buena manera de establecer una relación con una persona que, en el futuro, podría encajar bien en otro puesto ofertado.
Ofrecer una buena remuneración económica y emocional para conseguir la captación de talento
Las personas no se mueven solo por dinero, y mucho menos cuando estamos hablando de puestos de responsabilidad. Los empleados buscan algo más que un puesto de trabajo bien remunerado.
Por supuesto que la empresa debe ofrecer salarios competitivos y adaptados al nivel de exigencia y de responsabilidad de cada puesto, pero no debe quedarse ahí. Hoy en día el salario emocional juega un papel muy importante en el interés que pueden tener las personas talentosas en una empresa.
Se trata de todas aquellas cuestiones que satisfacen una necesidad personal del empleado, pero no son estrictamente económicas. Por ejemplo, que haya una guardería en el centro de trabajo, que se haya implantado un sistema de horario de trabajo flexible, la posibilidad de teletrabajar algunos días a la semana, etc.
Hay que contar con un plan de carrera
Las generaciones más jóvenes ya no quieren entrar a trabajar en una empresa y llegar a su jubilación en ella. Son conscientes de que para progresar van a tener que moverse. Sin embargo, si se sienten a gusto en su lugar de trabajo, no tienen problema en permanecer en él durante mucho tiempo.
Una buena forma de captar el talento más joven es ofrecer un buen plan de carrera. Que el candidato vea que tiene posibilidades de seguir ascendiendo. Que no va a tener que estar toda la vida ocupando el mismo puesto.
Si la empresa tiene en cuenta que las personas quieren progresar, sabrá bien qué ofrecerles. Porque el plan de carrera no es solo la promesa de un posible ascenso en el futuro, es la implicación de la empresa en la carrera laboral de sus empleados. Ofreciéndoles formación de calidad para que sigan mejorando y tengan más oportunidades de progresar.
Es importante tener un buen ambiente de trabajo
De nada sirve todo lo anterior si, una vez que el candidato se convierte en empleado, no acaba de sentirse a gusto en la empresa. Hay que cuidar tanto a los candidatos como a los trabajadores, y para ello es importante generar un buen ambiente de trabajo.
Esto hace que todo el mundo se sienta cómodo en su puesto, con sus compañeros, y con la empresa en general. El resultado es que bajan tanto los índices de absentismo como la tasa de rotación. Los que llegan a la compañía lo hacen para quedarse.
La captación de talento es una labor complicada en la que las empresas tienen mucho margen de mejora. ¿Estás buscando el mejor talento para tu empresa y no sabes cómo hacerlo? ¡Podemos ayudarte!