5 claves para liderar un equipo en remoto

Estos son los temas que trataremos:

La pandemia ha traído consigo la implantación del teletrabajo en muchos sectores. Esto, además de mejorar la conciliación, permite a las empresas encontrar talento en cualquier lugar del mundo. Pero esta forma de trabajar también lleva aparejados nuevos retos. Uno de los más complicados es cómo liderar un equipo en remoto.

Si ya es difícil hacer una buena gestión de los equipos de trabajo cuando todos los miembros están presentes en un mismo espacio físico, la situación se vuelve más compleja cuando los integrantes están cada uno en un lugar diferente. Pero que sea difícil, no quiere decir que sea imposible. Veamos cinco consejos que te permitirán llegar a ser el líder que los teletrabajadores necesitan.

1. Comunicar con claridad para liderar un equipo en remoto

Si la comunicación siempre es importante cuando se está al frente de un grupo de personas, se vuelve todavía más cuándo estamos ante un supuesto de trabajo en remoto.

Como líder, debes ser capaz de exponer las cosas de manera que todo el mundo las entienda, ya sea de forma oral o escrita.

Una de tus labores más importantes es establecer un orden de prioridades en las tareas a realizar y repartirlas entre los diferentes miembros del equipo. Pero, antes de hacerlo, debes asegurarte de que conoces bien a las personas con las que trabajas.

No nos referimos solo a sus capacidades y habilidades profesionales. En este caso hay que ir un paso más allá. El teletrabajo no siempre es una situación sencilla. Hay quien debe compaginarlo con el cuidado de algún familiar, o debe compartir su espacio de trabajo con otro miembro de la familia.

Por eso, una buena comunicación parte de que estés al tanto de las circunstancias personales de tus subordinados. Antes de nada, asegúrate de que cuentan con todos los medios para poder trabajar con la máxima comodidad posible, y de cuál es su disponibilidad.

Después puedes ir definiendo las metas a alcanzar por el equipo y el rol que debe asumir cada miembro para contribuir al objetivo final.

2. Crear mentalidad de tribu

En la oficina, la interacción personal es mucho más fácil. Los compañeros se ven a diario y charlan tanto de manera formal como de manera más informal mientras se toman un descanso.

Esas conversaciones informales no existen, a priori, en el teletrabajo, lo cual puede hacer que cada miembro del equipo se sienta un tanto aislado.

Como persona encargada de liderar un equipo en remoto, debes asegurarte de que esa mentalidad de tribu está ahí aunque los trabajadores no compartan un mismo espacio físico. Por ejemplo, creando un grupo de WhatsApp para comunicaciones más informales (felicitar el cumpleaños, enviar memes, etc.), pero siempre con moderación. O realizar una videoconferencia una vez por semana para que todo el mundo se vea las caras. Ni siquiera es necesario tratar únicamente de temas laborales, puede ser una charla más informal.

3. Abrir diferentes vías de comunicación

Hablábamos antes de la comunicación que tú mantienes con tu equipo, pero no te olvides del feedback que pueden darte sus miembros. Para recibirlo, es importante que los empleados cuenten con diferentes canales de comunicación.

La información fluirá mejor si hay canales públicos y otros privados. Estos medios pueden ser utilizados para comunicar dudas, ponerte sobre aviso de problemas, o incluso proponer sugerencias. 

Y no basta con crear las vías de comunicación. Asegúrate de que dispones de tiempo para atenderlas. No hace falta que respondas de forma inmediata a cada mensaje, pero la respuesta tampoco debería tardar demasiado en llegar.

Es más, si tus empleados no inician la comunicación contigo, puedes ser tú quien lo haga. No está de más que, de vez en cuando, mandes algún mensaje privado para interesarte por los miembros del equipo. Es una buena forma de comprobar que todo está bien en sus vidas tanto a nivel personal como laboral. Esto, además, contribuye a generar ese sentimiento de tribu del que hablábamos antes.

Si la comunicación es buena y el empleado siente que se preocupan por él, los índices de rotación en la empresa descienden de forma notable.

4. Dar autonomía a tus empleados, un acierto al liderar un equipo de trabajo en remoto

El hecho de que cada uno esté trabajando en su casa es la «excusa» perfecta para que les demuestres lo mucho que confías en cada miembro del equipo. Supervisa su trabajo, pero sin agobiar. Que no noten tu continua presencia al otro lado de su ordenador.

Un buen líder no se dedica a la microgestión, sino que sabe delegar y valora la autonomía de quienes tiene a su cargo. 

¿Tus trabajadores son profesionales, saben lo que tienen que hacer? Pues déjalos fluir. Notarás que la productividad empieza a aumentar rápidamente, porque nada la estimula más que una buena dosis de confianza.

Esta autonomía, junto con los canales de comunicación a los que acabamos de hacer referencia, pueden conseguir que el trabajo en remoto sea una experiencia muy satisfactoria para todos los implicados. Además, aumentará la fidelidad de los empleados con respecto a la empresa.

5. Sacarle el máximo partido posible a la tecnología

Nadie sabe absolutamente de todo, pero un buen líder debe estar al tanto de los avances tecnológicos que pueda aprovechar en su beneficio y en el de su equipo.

El teletrabajo nos hace depender de la tecnología, así que ahora es buen momento para sacarle el máximo partido posible. Buscando fórmulas que puedan hacer el trabajo más llevadero, más sencillo y también más eficiente.

Por ejemplo, puedes crear un listado con apps y herramientas que serían útiles en tu trabajo y compartirla con tus empleados. No se trata de obligarles a utilizarlas, pero sí de que sepan que están ahí y podrían resultarles de gran ayuda.

Súmate a la tendencia de los documentos colaborativos si es que no lo has hecho ya. Este sistema permite a varias personas trabajar a la vez en un mismo documento y que todos vean los cambios en tiempo real. Un sistema sencillo que ahorra mucho tiempo.

Incluso puedes organizar alguna videoconferencia para tratar cuestiones relacionadas con la tecnología y que hasta los trabajadores más reacios le pierdan el «miedo».

Liderar un equipo en remoto supone todo un reto, pero también puede ser una fuente de satisfacciones si lo haces bien. Ha llegado el momento de llevar a tus subordinados a un nuevo nivel de productividad y motivación. ¿Te atreves con ello? Si lo que buscas es un profesional que sea capaz de asumir este rol, nos tienes a tu disposición para ayudarte a encontrarlo.

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